El gobernador del Banco de Corea, Lee Chang Yong, vaticina que la inflación se ralentizará hasta marcar tasas inferiores al 2,5% hacia el segundo semestre de 2024.
Como fundamento de su pronóstico presenta los datos de julio, mes en que los precios al consumidor subieron un 2,3% y la inflación subyacente marcó el 3,3%. Explica que si bien entre agosto y septiembre es posible que los precios suban más del 3%, la inflación se desacelerará paulatinamente en meses posteriores y estará por debajo del 2,5% en la segunda mitad del próximo año.
El jefe del banco central sostiene que el elevado nivel de los precios sigue agobiando a la población, aunque la reciente carestía se atribuye en mayor medida a factores externos y Corea del Sur es casi el único país de entre las economías desarrolladas que logró en tiempo breve frenar el ritmo inflacionario y limitarlo a menos del 3%.