El Comité de Medidas sobre Secuetrados por Corea del Norte, un órgano consultivo interministerial, mantuvo su primera reunión desde hace 11 años, en junio de 2012.
Los asistentes expresaron al unísono que durante los últimos años el Estado actuó con cierta negligencia descuidando su deber de proteger a los ciudadanos, y sin hacer nada por aliviar el dolor de aquellos con familiares detenidos en Corea del Norte.
Entre otros, aludieron al misionero Kim Jeong Uk, que lleva diez años retenido en Corea del Norte, destacando la firme determinación del Gobierno por lograr la pronta repatriación de los surcoreanos detenidos al otro lado de la frontera, al margen de reconocer a sus familiares como víctimas de secuestro a manos de Pyongyang, y ofrecerles una compensación.
Explicaron que el régimen norcoreano niega totalmente la existencia de surcoreanos detenidos, secuestrados o prisioneros de guerra, mostrando una irresponsabilidad total al ignorar las peticiones de Seúl por saber del paradero de esas personas y urgiendo a su repatriación.