Washington ha reiterado que no tiene intenciones hostiles contra Corea del Norte, en respuesta a la declaración de Kim Jong Un durante el pleno del Partido de los Trabajadores llamando a completar los preparativos de guerra.
El jueves 28 un portavoz del Departamento de Estado estadounidense confirmó que su país mantiene la voluntad de dialogar sin condiciones, y que pese a los reiterados ensayos balísticos de Pyongyang, Estados Unidos mantiene su promesa de optar por la vía diplomática y cooperar en temas humanitarios, al margen del debate sobre misiles o armas de destrucción masiva.
Estados Unidos criticó la amenazante e irresponsable retórica de Corea del Norte sobre su programa de armas, al vincular los ensayos balísticos y otras maniobras militares con el uso de armas nucleares tácticas. En respuesta a esos ensayos, Washington mantiene una estrecha colaboración con Corea del Sur, Japón y otros aliados para frenar el desarrollo balístico norcoreano, definir medidas de disuasión ante posibles ataques, y adoptar mecanismos para hacer cumplir las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
Según informó la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte, durante la segunda jornada del pleno del Partido de los Trabajadores, celebrada el jueves 28, , Kim Jong Un ordenó ampliar los avances militares de los últimos años y optimizar los preparativos de guerra no solo en el ámbito militar, sino también del sector defensa, del programa nuclear y de la población civil.