Tras el reciente lanzamiento de misiles crucero por Corea del Norte, Estados Unidos ha reafirmado su inquebrantable compromiso de defensa hacia Corea del Sur. 

Según expresó un portavoz del Departamento de Defensa, en respuesta a preguntas de la prensa el miércoles 24, Washington ve con preocupación el programa militar norcoreano, que considera una amenaza, y mantiene la promesa de proteger a Corea del Sur y Japón, y de preservar la paz y estabilidad en la zona.

Enfatizó que Estados Unidos seguirá cooperando estrechamente con Seúl y Tokio para contrarrestar cualquier posible amenaza que pueda surgir. 

En la misma línea, el portavoz principal del Departamento de Estado, Vedant Patel, compartió una postura similar, urgiendo a Corea del Norte a evitar actividades que puedan ser vistas como amenazas, y a fomentar un diálogo serio y continuado. 

En cuanto a la inquietud que generan las recientes provocaciones norcoreanas, como lanzamiento de misiles o demolición de monumentos vinculados a las relaciones intercoreanas, Patel aludió a esos hechos como factores de desestabilización y de riesgo.

Subrayó que Estados Unidos está listo para abordar una amplia gama de temas críticos con Corea del Norte, al tiempo de mantener una sólida colaboración con Corea del Sur y Japón para disuadir a Pyongyang y reforzar las alianzas regionales.

Finalmente, reafirmó que Washington no busca una confrontación con el régimen norcoreano y está abierto a dialogar sin condiciones.