El embajador de Estados Unidos en Corea del Sur, Philip Goldberg, ha expresado que su país está preparado para cualquier eventualidad, al aumentar las tensiones entre las dos Coreas por el envío de globos con propaganda y el uso de altavoces en la frontera.
En un debate coordinado por el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS) que tuvo lugar en Washington el martes 11, hora local, Goldberg señaló la "impredecible naturaleza" de Pyongyang y afirmó que nunca bajará la guardia hacia Corea del Norte.
Destacó que tanto Paul LaCamera, comandante de las Fuerzas Combinadas Corea del Sur-Estados Unidos, como la Embajada estadounidense en Seúl, siguen de cerca la situación entre las dos Coreas, y recordó que la presencia de 28.500 soldados estadounidenses en Corea del Sur muestra el compromiso de seguridad de Estados Unidos con la región.