Estados Unidos considera preocupante el refuerzo de relaciones entre Corea del Norte y Rusia, además de señalar que observará de cerca el apoyo que Corea del Norte recibirá de Rusia a futuro, al comentar la visita del presidente ruso Vladimir Putin a Corea del Norte los días 18 y 19 de junio.
John Kirby, coordinador de Comunicación Estratégica del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, comentó en sesión informativa el día 17, hora local, que no le preocupa la visita en sí, sino el acercamiento entre Pyongyang y Moscú.
Al hablar de las causas, el funcionario enfatizó que los misiles balísticos suministrados por Corea del Norte a Rusia sirven para alcanzar objetivos en Ucrania, mientras que algunas medidas recíprocas podrían afectar a la seguridad de la península coreana.
Dicho comentario podría interpretarse como cierta inquietud porque Corea del Norte, que suministró gran cantidad de proyectiles de artillería y misiles balísticos a Rusia, pueda recibir una compensación tangible e intangible con motivo de la visita de Putin.
Kirby añadió que por el momento se ignora el alcance y resultado de la cooperación entre ambos países, y por tanto Estados Unidos seguirá observando muy de cerca los avances.