Tras detectar indicios de que Pyongyang ordenó abrir la prensa fronteriza de Hwanggang, Seúl valora adoptar medidas.
Desde el Ministerio de Reunificación, entidad a cargo de los temas intercoreanos y las políticas hacia Corea del Norte, aseguran que siguen de cerca los cambios en las corrientes fluviales próximas a la frontera junto con otras agencias gubernamentales. Al ser preguntado sobre si el régimen norcoreano avisó de antemano a Seúl de su intención de abrir la presa, dijo que no recibieron notificación alguna.
La presa Hwanggang se ubica a unos 40 kilómetros al norte de la Línea de Demarcación Militar entre las dos Coreas, y su apertura genera un aumento significativo del caudal de los ríos en la zona que fluyen hacia el sur, sobre todo en temporadas de monzones, creando un posible riesgo para la población surcoreana.
De hecho, la apertura de dicha presa sin preaviso se cobró la vida de seis surcoreanos en septiembre del año 2000, incidente que llevó a Seúl a pedir al Norte que avisara con antelación antes de abrir la presa, solicitud que Pyongyang aceptó. No obstante, hasta la fecha Corea del Norte solo ha cumplido su promesa en tres ocasiones: dos veces en el verano de 2010 y otra en julio de 2013.