En su investigación sobre el presunto trato de favor recibido por el yerno del expresidente Moon Jae In al ser contratado como ejecutivo en una aerolínea de bajo costo, la Fiscalía aludió al exmandatario como sospechoso, desatando una fuerte polémica entre los partidos.
Al respecto, 37 legisladores del opositor The Minjoo declararon en rueda de prensa el domingo 1 que se trata de una represalia política, además de una maquinación de la Fiscalía para dispersar la atención de la gente ante sus dudosas decisiones sobre las acusaciones contra la primera dama Kim Keon Hee.
El líder de la formación, Lee Jae Myung, enfatizó que sin embargo y pese a la pretensión de los fiscales, sus investigaciones no podrán cegar el ojo público, ni mucho menos tapar los fracasos de la actual administración de Yoon Suk Yeol.
En cambio, el oficialista Poder del Pueblo criticó a la oposición tildándola de hipócrita, y puntualizó que después de tanto insistir en que todo ciudadano surcoreano es igual ante la ley, ahora The Minjoo se comporta como la víctima, definiendo como "venganza política" las sospechas relacionadas con Moon.
La Fiscalía Regional de Jeonju, a cargo del caso en cuestión, declaró que las investigaciones avanzan de forma objetiva y siguiendo el protocolo establecido, al margen de la situación política nacional.