A partir del día 4 el Gobierno movilizará a médicos militares y agentes sanitarios para suplir la falta de personal en las unidades de urgencia, cuya operativa se ve limitada medio año después de la renuncia colectiva de los médicos residentes en rechazo al aumento de cupo para estudiar medicina.
Desde el Ministerio de Salud y Bienestar avanzaron el lunes 2, que harán todo lo posible para mantener estable la atención de urgencias. Así, a partir de esta semana asignarán sucesivamente a las unidades cuya gestión peligra un total de 235 médicos militares y agentes sanitarios, divididos en ocho grupos.
Según las autoridades sanitarias, por el momento hay disponibles 5.918 camas de urgencia a nivel nacional, un 97,5% del volumen habitual, mientras que el personal médico en las unidades de emergencia apenas llega al 73% del nivel normal. De las 409 unidades de urgencia a nivel nacional, 406 todavía operan 24 horas al día, aunque 27 ofrecen atención reducida con menor disponibilidad de camas.