El Gobierno de Corea del Sur ha presentado una apelación contra el fallo de un tribunal británico que desestimó su demanda para anular el dictamen de un arbitraje internacional (ISDS) que lo obliga a pagar unos 1.300 millones de wones al fondo estadounidense Elliott Management.
La apelación se basa en la creencia de que la corte británica cometió un error al interpretar las disposiciones del Tratado de Libre Comercio entre Corea del Sur y Estados Unidos.
El Gobierno surcoreano advirtió que, si no se corrige esta decisión, podría sentar un precedente negativo a la hora de interpretar futuros acuerdos de inversiones, aumentando el riesgo de demandas injustas en el marco del ISDS.
El caso surgió cuando Elliott Management presentó una demanda contra Corea del Sur, alegando que el Gobierno presionó al fondo de pensiones nacional para apoyar la fusión entre Samsung C&T y Cheil Industries, generando pérdidas al fondo estadounidense. En 2022, la Corte Permanente de Arbitraje dictaminó que Corea del Sur debía compensar a Elliott con unos 1.300 millones de wones.