El Gobierno ha discutido posibles medidas de respuesta ante la regulación anunciada por Estados Unidos prohibiendo la venta de vehículos conectados con software y componentes de origen chino y ruso, para las funciones de conducción autónoma y comunicación.
El Ministerio de Comercio, Industria y Energía celebró el martes 24 una reunión público-privada para valorar el impacto en la industria automotriz surcoreana y debatir medidas tras el anuncio estadounidense.
Un día antes, el martes 23, el Departamento de Comercio de Estados Unidos emitió una norma provisional prohibiendo la venta o importación de vehículos conectados mediante hardware o software de ciertos países considerados de preocupación, como China y Rusia.
En concreto, dichos productos incluyen hardware y software de sistemas de conectividad del vehículo y software para sistemas de conducción autónoma.