El índice del sentimiento de consumidor, que refleja la percepción de los ciudadanos sobre la situación económica en general, empeoró en septiembre por segundo mes consecutivo al perder 0,8 puntos respecto a agosto.
Así, actualmente se sitúa en 100, el menor desde mayo cuando registró 98,4 puntos.
Cuando el índice del sentimiento del consumidor supera los cien puntos, indica que hay más optimismo sobre la situación económica. En caso contrario, que persiste el pesimismo.
El Banco de Corea atribuye el descenso a la inquietud que perciben los consumidores por la lenta recuperación de la demanda interna pese a la ralentización de la inflación. Según el banco central, el ritmo de aumento de los precios se ha desacelerado por los bienes agrícolas y los combustibles, que marcan tasas inflacionarias más bajas, aunque no descartan nuevas subidas en las tarifas de los servicios públicos.