Las personas que trabajan con contrato indefinido para el Ministerio del Interior y entidades dependientes se jubilarán a la edad de 65 y no a los 60 años, en virtud de la reforma del reglamento interno efectuada por la cartera. 

El cambio afectará a unas 3.800 personas, incluido el personal de limpieza y mantenimiento. 

Asimismo, podrán disponer de bajas de un año para tratamientos de infertilidad, con posibilidad de prorroga por doce meses más, y licencias de hasta tres años por embarazo o cuidado de hijos menores de ocho años.