La Agencia de Control y Prevención de Enfermedades ha advertido del aumento del riesgo de sufrir accidentes cerebrovasculares o ataques cardíacos en invierto, sobre todo entre colectivos vulnerables, como personas mayores y pacientes con afecciones crónicas.
Para prevenir esos eventos, es imprescindible que personas de edad, pacientes con enfermedades crónicas o personas con algún historial médico grave comprueben la temperatura antes de salir de casa, procuren no permanecer en espacios exteriores por mucho tiempo, y se abriguen bien para mantener estable la temperatura corporal.
También llamó a estar siempre alerta porque tanto los accidentes cerebrovasculares como los ataques cardiacos ocurren de forma súbita.
Los síntomas más inmediatos del infarto cerebral son parálisis en uno de los brazos, dificultad repentina para hablar o para ver, mareos y fuertes dolores de cabeza, mientras ante dolores en el pecho, en la mandíbula o en el cuello recomiendan consultar a un médico pues pueden ser síntomas previos a un ataque cardíaco.