Estados Unidos ha condenado la última prueba de un misil balístico intercontinental (ICBM) de Corea del Norte, instando a Pyongyang a entablar un diálogo serio. 

Sean Savett, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, emitió un comunicado el jueves 31 condenando el lanzamiento, al tiempo de calificarlo como un grave incumplimiento de múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.

Recalcó que si bien el Comando del Indo-Pacífico de Estados Unidos cree que la prueba no supone una amenaza inmediata para las personas ni el territorio de Estados Unidos o sus aliados, el lanzamiento aumenta innecesariamente la tensión y genera el riesgo de desestabilizar la situación de seguridad en la zona.

También señaló que la prueba muestra que Corea del Norte sigue priorizando sus programas ilegales de armas de destrucción masiva y sus misiles balísticos por encima del bienestar de sus ciudadanos.

Por último, el funcionario instó a todos los países a condenar dichos incumplimientos y a pedir a Pyongyang que cese con sus acciones desestabilizadoras y entable un diálogo serio.