El presidente Yoon Suk Yeol ha afirmado que la cooperación trilateral entre Corea del Sur, Estados Unidos y Japón continuará durante la entrante administración de Donald Trump.

Durante una rueda de prensa ofrecida el jueves 7, Yoon dijo que habló por teléfono con el presidente electo Trump al día siguiente a su victoria. 

Explicó que la cooperación empresarial tripartita mantuvo un buen entente durante el primer mandato de Trump, y dio crédito a su papel en el establecimiento de la cooperación económica y de seguridad trilateral, así como al liderazgo global compartido.

Yoon habló a Trump de las recientes provocaciones de Corea del Norte, incluido el lanzamiento de globos con basura, las interrupciones del GPS y los lanzamientos de misiles, mientras que el recién elegido presidente estadounidense dijo que intentarán reunirse lo antes posible para discutir medidas de respuesta.

En otro orden de cosas, Yoon comentó que Seúl está haciendo todo lo posible para minimizar las pérdidas económicas del país ante un posible agravamiento de la incertidumbre por el aumento de aranceles y otras políticas de la administración entrante de Trump.

Afirmó que el Gobierno lleva mucho tiempo preparándose para la cobertura de riesgos a fin de compensar pérdidas, y agregó que primero necesitará reunirse con Trump y actuar rápidamente para responder a las políticas prioritarias de la administración entrante.

Sobre el apoyo de armas a Ucrania, el mandatario coreano dijo que no descartaba la posibilidad de su envío. Destacó que Corea recibió mucha ayuda de la comunidad internacional en tiempos difíciles, por lo que es natural ayudar a los países que sufren invasiones ilegales. Puntualizó que hasta la fecha Corea del Sur ha ofrecido principalmente apoyo económico y humanitario, incluidos medicamentos, bienes de primera necesidad y fondos necesarios.  

No obstante, la emergencia de dos variables como son la transferencia de tecnología militar sensible desde Rusia, que podría representar una amenaza fatal para la seguridad surcoreana, y la adquisición de experiencia en combate por parte del ejército norcoreano, son factores que deben considerarse al hablar sobre suministro de armas.