Kim Jong Un se reunió el viernes 29 de noviembre con el ministro de Defensa de Rusia, Andréi Beloúsov, durante su visita en Pyongyang.
Según divulgó la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte, Beloúsov fue recibido con una gran ceremonia de bienvenida, que el líder norcoreano aprovechó para proclamar que seguirán apoyando a Rusia, además de considerar una intervención militar directa en el conflicto territorial de Crimea, o la autorización de Estados Unidos y Occidente a Ucrania para usar armas de largo alcance.
Kim Jong Un justificó la medida adoptada por Moscú de usar misiles Oreshnik, capaces de portar varias ojivas nucleares, contra los misiles ATACMS y Storm Shadow estadounidenses lanzados por Kiev.
Sobre el objetivo de su viaje a Corea del Norte, los analistas estiman que buscaba solicitar más ayuda militar a Pyongyang, como envío de tropas o misiles.