Las máximas autoridades militares de Corea del Sur convocaron el miércoles 4 una reunión de comandantes de operaciones con carácter de urgencia, donde el jefe de Estado Mayor Conjunto, Kim Myung Soo, instó a las Fuerzas Armadas a no alterarse por los recientes acontecimientos, y a seguir cumpliendo fielmente el papel que les corresponde: promover la defensa nacional.
Kim destacó que la misión prioritaria del Ejército es proteger la seguridad de los ciudadanos, manteniendo una férrea vigilancia frente a Corea del Norte, en un afán de impedir que los soldados se inquieten ante la confusión derivada de la ley marcial y su casi inmediata anulación.
Asimismo, el jefe de Estado Mayor conversó por teléfono con el comandante de las fuerzas combinadas Corea-Estados Unidos, Paul LaCamera y ambos coincidieron en no descuidar la preparación militar ante posibles provocaciones de Pyongyang.