El presidente Yoon Suk Yeol se disculpó con el pueblo surcoreano por causar ansiedad e incomodidad al decretar la ley marcial.
En un discurso público televisado a nivel nacional el sábado 7, Yoon también prometió que no habrá otra declaración de ley marcial en el futuro.
El mandatario expresó que no evadirá su responsabilidad legal o política relacionada con la ley marcial.
Explicó que decretar la ley marcial nació de su propia desesperación como presidente, responsable en última instancia de los asuntos estatales, pero con dicho proceso generó gran ansiedad y múltiples perjuicios a los ciudadanos.
Por último, afirmó dejará en manos del oficialista Poder del Pueblo decidir sobre su mandato, y también las posibles vías para estabilizar la situación política tras su declaración de la ley marcial el martes 3 por la noche.