El ministro del Interior, Lee Sang Min, presentó su dimisión el domingo 8.
En una declaración, Lee expresó su intención de dimitir y ofreció disculpas al pueblo, reconociendo profundamente su responsabilidad por no haber asistido adecuadamente al presidente.
Añadió que no debería haber más vacíos ni confusión en los asuntos de Estado, que volverá a su vida de ciudadano común, y que trabajará para que Corea pueda dar un nuevo salto.
Según la cartera, Yoon aceptó la renuncia de Lee poco después de que éste anunciara su intención de dimitir.