Han surgido acusaciones de que las fuerzas militares surcoreanas habrían intentado detener al juez Kim Dong Hyun, quien absolvió a Lee Jae Myung, líder del principal partido opositor, The Minjoo, durante la ley marcial del 3 de diciembre.
Según informes, el comisionado general de la Policía Nacional, Cho Ji Ho, declaró ante la unidad especial de investigación que el comandante de la Agencia de Contrainteligencia Militar, Yeo In Hyung, le ordenó detener al juez Kim. Este magistrado había emitido un fallo de absolución, el 25 de noviembre, en un caso de presunta instigación a falso testimonio contra Lee Jae Myung. Además, Kim supervisa otro caso de gran relevancia relacionado con el escándalo de Daejang-dong, en el que Lee también está implicado.
El Tribunal Supremo calificó este presunto plan como una grave violación a la independencia judicial y al Estado de derecho, exigiendo una investigación rápida y sanciones legales estrictas si los hechos son confirmados. Por su parte, el Tribunal del Distrito Central de Seúl denunció que estas acciones representan una amenaza directa a los principios de la separación de poderes y a la autonomía judicial garantizados por la Constitución.