Corea se consolida como un país sólido y estable en el cumplimiento de sus deudas, según la agencia internacional de calificación crediticia estadounidense Fitch, que ha mantenido este año el 'rating' de AA- (doble A menos) con perspectiva "estable" para el país.
A pesar de la incertidumbre política que podría prolongarse en los próximos meses, la agencia considera que esto no tendrá un impacto significativo en la economía ni en el sistema financiero nacional.
No obstante, Fitch ha revisado a la baja su previsión de crecimiento para la economía surcoreana en 2025, reduciéndola del 2% al 1,7%. Esta revisión responde a los efectos de la incertidumbre política interna y de las medidas comerciales de Estados Unidos, especialmente en lo referente a los aranceles.
Para este año, la agencia espera una recuperación del consumo y un repunte en la inversión en infraestructura y construcción, lo que podría llevar el crecimiento del PIB a un 2,1%.