El líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, ha señalado a Estados Unidos como el principal responsable de la rivalidad que persiste en torno a la península coreana.
El sábado 8, Kim visitó el Ministerio de Defensa de Corea del Norte con motivo del 77º aniversario de la creación de las Fuerzas Armadas del país. Durante su intervención, reafirmó su política de fortalecer el potencial nuclear de la nación y detalló varios planes que Pyongyang tiene previsto llevar a cabo para aumentar su capacidad de disuasión nuclear. Aunque no ofreció detalles específicos sobre estos planes, se especula que incluyen tanto el desarrollo de armas nucleares como la modernización del armamento convencional de Corea del Norte, además de una mayor cooperación militar con Rusia.
El dirigente norcoreano también subrayó que EEUU es responsable de la guerra en Ucrania y sugirió que podría enviar tropas adicionales al frente para apoyar a Rusia, reiterando su compromiso de seguir respaldando a Moscú.
No obstante, Kim no mencionó en ningún momento al presidente estadounidense, Donald Trump, ni hizo referencia a las recientes declaraciones de este o de otros funcionarios de Washington sobre Pyongyang o su programa nuclear.