El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el lunes 10 (hora local) la imposición de aranceles del 25% a todas las importaciones de acero y aluminio, una medida que ya había adelantado el domingo 9 y que reiteró asegurando que no habrá excepciones ni exenciones. Los nuevos gravámenes entrarán en vigor a partir del 4 de marzo, según informó posteriormente la Casa Blanca.

Con esta decisión, se intensifica la "guerra arancelaria" iniciada por Washington, que comenzó la semana pasada cuando el mandatario impuso un arancel adicional del 10% sobre las importaciones procedentes de China, sumándose a los aranceles ya existentes sobre ese país. En respuesta, Beijing adoptó rápidamente medidas similares, con aranceles sobre chips y metales.

La amenaza para Corea del Sur es que inevitablemente se verá afectada. Primero, porque es uno de los mayores exportadores de acero al mercado estadounidense, y segundo, porque Trump ha anticipado nuevas tarifas sobre otros productos, como automóviles, semiconductores y medicamentos, que son algunos de los bienes que el país más exporta a EEUU.