El grupo de hackers Lazarus, presuntamente vinculado a Corea del Norte, ha logrado convertir en dinero real cerca del 20% de las criptomonedas sustraídas durante el ciberataque a la plataforma de intercambio Bybit, ocurrido el pasado 21 de febrero. El robo, que asciende a aproximadamente 2 billones de wones, se considera el mayor de la historia en el ámbito de los activos digitales.
Según la emisora británica BBC, Lazarus ha logrado transformar en efectivo al menos 300 millones de dólares de los 1.460 millones robados de una billetera de la criptodivisa Ethereum.
Desde el ataque, Bybit ha intensificado sus esfuerzos para rastrear el flujo de los fondos sustraídos. Aunque la plataforma consiguió localizar y congelar unos 40 millones de dólares, no ha podido evitar que una parte considerable de las criptomonedas fuera convertida en dinero real. Expertos del sector han señalado que, debido a las sofisticadas técnicas de blanqueo de capitales de Corea del Norte, la recuperación de los fondos será una tarea extremadamente complicada.
Pyongyang nunca ha reconocido su vinculación con Lazarus, aunque la comunidad internacional sospecha con fundamento que el régimen norcoreano utiliza estos ciberataques para financiar su programa armamentístico y nuclear. En este contexto, el grupo de hackers también está relacionado con otros grandes robos, como los que afectaron a la plataforma de intercambio de criptomonedas Upbit en noviembre de 2019 y a la cadena de bloques Ronin Network en 2022.