Varias desertoras norcoreanas han instado a la comunidad internacional a tomar medidas en relación con la grave situación de los derechos humanos en Corea del Norte. Las denunciantes comparecieron en la sede de la ONU en Nueva York, durante el 69º período de sesiones de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer, para compartir sus experiencias personales.
Una de las participantes fue la activista Park Ji Hyun, quien actualmente reside en Reino Unido tras escapar de Corea del Norte. A través de una intervención en línea, denunció las violaciones de derechos humanos que sufren las mujeres norcoreanas.
Por su parte, Jang Eun Sook, otra desertora que actualmente estudia en la Universidad Brandeis, relató su experiencia en un campo de detención donde fue encarcelada cuando era menor de edad, tras ser capturada durante un intento de huir de su país natal.
En la apertura del evento, el embajador de Corea del Sur ante la ONU, Hwang Joon Gook, subrayó que la cuestión de los derechos humanos en Corea del Norte ya no puede considerarse un tema secundario frente a la cuestión nuclear. El diplomático destacó que el régimen norcoreano se sostiene tanto mediante su desarrollo nuclear como a través de abusos sistemáticos de estos derechos, que constituyen un aspecto crucial para entender la verdadera naturaleza del país.