El incendio ocurrido en enero en un avión de Air Busan en el Aeropuerto de Gimhae pudo haber tenido su origen en una batería, según ha informado el Comité de Investigación de Accidentes Aéreos y Ferroviarios de Corea.
El análisis realizado por el Servicio Forense Nacional identificó el primer foco de fuego en el compartimento superior, sobre la fila 30, en el lado izquierdo del avión, donde se hallaron restos de una batería auxiliar con evidentes signos de fusión eléctrica.
Los expertos concluyeron que la batería podría haber experimentado un fallo interno que desató el incendio, aunque la gravedad de la combustión impide determinar con exactitud su causa. Asimismo, se descartó que el fuego fuera provocado por un fallo eléctrico en el avión.
El comité continuará con la investigación de esta hipótesis y, si lo considera necesario, emitirá recomendaciones de seguridad a la aerolínea.