El embajador de Corea del Sur ante las Naciones Unidas, Hwang Joon Kook, instó a Corea del Norte a dejar de sacrificar a su pueblo para apoyar a Rusia en la guerra en Ucrania, un conflicto que, según el diplomático, ha provocado un grave sufrimiento a los soldados norcoreanos desplegados y a sus familias.

Durante una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU celebrada el miércoles 26 (hora local) en Nueva York, centrada en el mantenimiento de la paz y la seguridad en Ucrania, Hwang exigió a Pyongyang que ponga fin de inmediato al sacrificio de ciudadanos norcoreanos en el frente a cambio de respaldo militar, político y económico por parte de Moscú.

El embajador afirmó que, según el testimonio de un prisionero de guerra norcoreano capturado por el Ejército ucraniano, los soldados fueron enviados bajo el engaño de que participarían en un entrenamiento militar. Además, denunció que las familias de los combatientes no son informadas de su despliegue hasta que reciben un certificado de defunción, acompañado de una exigencia de confidencialidad por parte de las autoridades norcoreanas, que les obligan a firmar un juramento para no revelar lo sucedido.

Hwang también se refirió a la reciente visita a Pyongyang del secretario del Consejo de Seguridad ruso, Serguéi Shoigú, quien reafirmó la plena implementación del Tratado de Asociación Estratégica Integral, firmado entre ambos países en 2024. A juicio del diplomático surcoreano, esta visita confirma que la cooperación militar ilegal entre Corea del Norte y Rusia continuará, lo que —según subrayó— supone un desafío directo a los esfuerzos de la comunidad internacional para poner fin a la guerra en Ucrania.