Los estudiantes de 38 de las 40 facultades de Medicina de Corea del Sur han regresado a las aulas antes de la medianoche del lunes 31, fecha límite establecida por el Gobierno para formalizar la reinscripción. Los alumnos habían abandonado sus estudios o renunciado a matricularse en señal de rechazo al plan del Ministerio de Educación, que contemplaba un incremento del número de plazas para médicos en formación.

Las únicas excepciones al retorno generalizado han sido la Universidad de Inje y la Universidad Hallym, donde la reincorporación no se ha completado de forma plena.

El ministerio evaluará ahora si el regreso es efectivo y total tomando como referencia la asistencia real a clase y no únicamente la matrícula formalizada. En este proceso, quedarán excluidos del recuento aquellos que, tras haberse inscrito, soliciten un semestre sabático o se nieguen a acudir al aula.

El pasado 7 de marzo, el Gobierno se comprometió a mantener en 3.058 el número de plazas de Medicina para el curso académico 2026 —la cifra previa al polémico aumento— si todos los estudiantes se reinscribían y reanudaban su carrera antes de que finalizara el mes de marzo.