La sentencia del Tribunal Constitucional a favor de la destitución del expresidente Yoon Suk Yeol ha provocado reacciones contrapuestas entre los manifestantes congregados en las inmediaciones de la sede judicial.
Los ciudadanos partidarios del cese inmediato de Yoon celebraron con entusiasmo el veredicto, anunciado el viernes 4 a las 11:22 de la mañana, abrazándose y expresando su alegría por lo que calificaron como una victoria de la democracia y del poder soberano del pueblo.
En contraste, los simpatizantes del exmandatario respondieron con gritos de protesta tras conocer el fallo. Uno de los manifestantes llegó incluso a romper la ventana de un autobús de la Policía con un bastón, acto por el que fue detenido.
A pesar de incidentes aislados como este, hasta el momento no se han registrado enfrentamientos graves, gracias al llamamiento de los organizadores de las concentraciones a evitar la violencia y mantener la calma, así como a la amplia presencia policial, que contribuyó a preservar el orden y la seguridad en la zona.