Alimentar a palomas u otros animales considerados perjudiciales para la salud pública o el medioambiente en espacios públicos será objeto de multa en Seúl a partir de julio.
Según ha anunciado el Ayuntamiento de Seúl, la sanción podrá alcanzar hasta un millón de wones, en virtud de la Ley de Protección y Mantenimiento de Animales Silvestres, revisada en enero de 2024. La prohibición se aplicará en 38 lugares, incluidos parques a orillas del río Hangang y espacios emblemáticos de la ciudad como la plaza Gwanghwamun y el Bosque de Seúl.
La normativa clasifica como especies nocivas a animales como el gorrión, la urraca y el cuervo, que afectan negativamente a los cultivos agrícolas, así como a la paloma, el faisán, el ciervo, el jabalí y la ardilla roja, cuya alta densidad puede causar daños en determinadas zonas urbanas.
El régimen sancionador establece una multa de 200.000 wones por una primera infracción, 500.000 wones en caso de reincidencia, y un millón de wones en la tercera violación de la norma.