El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró el jueves 10 (hora local) que su país podría adquirir buques de naciones aliadas con experiencia en construcción naval como parte de su plan para revitalizar la industria marítima estadounidense.
Durante una reunión de Gabinete, Trump recibió un informe del asesor de seguridad nacional, Mike Waltz, sobre una reciente orden ejecutiva firmada con el objetivo de reconstruir el sector naval nacional. En el documento se destaca la brecha existente entre EEUU, que solo registra cinco pedidos de nuevos barcos en 2024, frente a los 1.700 de China.
El mandatario subrayó que, mientras se trabaja en recuperar la capacidad productiva interna, Washington podría recurrir a la compra de buques de última generación procedentes de países con industrias navales avanzadas.
Corea del Sur, líder mundial en el sector, se perfila como uno de los principales beneficiarios de esta posible apertura. Trump ya había mencionado la opción de cooperación en esta área durante una conversación telefónica con el presidente en funciones surcoreano, Han Duck Soo, mantenida el martes 8.