El Banco de Corea ha decidido mantener sin cambios el tipo de interés de referencia, que permanecerá en el 2,75% anual.
La decisión ha sido adoptada el jueves 17 durante la reunión del Comité Financiero-Monetario, en la que se optó por una postura de cautela ante el actual contexto económico. El tipo fue elevado de forma consecutiva en octubre y noviembre de 2024, pero en enero pasado se mantuvo estable y en febrero se recortó, en respuesta al riesgo de una posible recesión.
Según explicó la entidad, aunque los precios permanecen relativamente estables, la desaceleración económica registrada en el primer trimestre y el deterioro de los términos del comercio mundial amenazan con frenar el crecimiento nacional. En este contexto, el banco central considera necesario observar la evolución de la situación con mayor prudencia, prestando especial atención a factores como la volatilidad del tipo de cambio y el aumento del endeudamiento de los hogares.
Asimismo, advierte sobre la persistencia de elementos de incertidumbre, como la política arancelaria de Estados Unidos o las futuras medidas de reactivación económica que prepara el Gobierno.
El Banco de Corea también ha revisado a la baja sus previsiones de crecimiento para este año, y ahora prevé que la expansión podría ser inferior al 1,5% proyectado en febrero. Aunque se espera que la demanda interna logre salir del estancamiento actual, el entorno comercial volátil e incierto limitará una recuperación más firme.