El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, se refirió a Corea del Norte como un "Estado armado con equipos nucleares" durante una entrevista difundida el miércoles 23 (hora local) en un pódcast.
Las declaraciones de Rubio se produjeron en el marco de una conversación en la que se le preguntó si el principal interés de la Casa Blanca debía ser preservar la estabilidad internacional o promover la democracia. El secretario respondió de forma ambigua y señaló que el mundo actual enfrenta desafíos distintos a los del pasado, con Corea del Norte "armada con equipos nucleares" e Irán con una evidente ambición nuclear.
Con esta afirmación, el jefe de la diplomacia estadounidense reconoció implícitamente el cambio en el equilibrio geopolítico global desde comienzos del siglo XXI, cuando EEUU ejercía una hegemonía casi indiscutida. Asimismo, sus palabras suponen una admisión indirecta de la capacidad nuclear del régimen norcoreano.
Estas declaraciones se suman a las del propio presidente Donald Trump, quien en una ocasión anterior describió a Pyongyang como una "potencia nuclear". Aunque Washington no reconoce formalmente al país como un "Estado nuclear", los comentarios tanto del mandatario como de su secretario de Estado sugieren que, en la práctica, lo consideran parte del grupo de naciones con capacidad nuclear, al igual que ocurre con India, Pakistán o Israel.