Los principales candidatos presidenciales han comenzado a presentar sus programas electorales de cara a los comicios del 3 de junio, con un claro énfasis en la recuperación económica y el impulso del crecimiento nacional.
El aspirante del Partido Democrático, Lee Jae Myung, ha propuesto una estrategia de desarrollo centrada en industrias emergentes como la inteligencia artificial, los contenidos digitales y el sector de defensa. Su objetivo es convertir Corea en una potencia mundial a través de estos sectores estratégicos. Según ha afirmado, este enfoque permitirá afrontar eficazmente los retos que amenazan el bienestar de la ciudadanía, al tiempo que se resuelven los problemas cotidianos relacionados con el empleo y la calidad de vida.
Por otro lado, el nominado de Poder del Pueblo, Kim Moon Soo, se ha presentado como el "próximo presidente económico de Corea", y ha subrayado su compromiso con un modelo de crecimiento liderado por el sector privado, basado en la creación de puestos de trabajo y en la mejora del entorno empresarial. Entre sus propuestas destacan una amplia desregulación, reformas fiscales y planes ambiciosos para atraer inversiones, con el fin de que las propias compañías asuman un papel protagonista en la generación de empleo.
Más allá del ámbito económico, otros temas han comenzado también a perfilarse en el debate electoral. El candidato de Nueva Reforma, Lee Jun Seok, ha defendido una reestructuración de la Administración Pública para mejorar la eficiencia del sistema burocrático. Lee Jae Myung, en cambio, ha abogado por limitar las competencias de la Fiscalía y fortalecer la democracia. Por su parte, Kim ha propuesto reforzar los mecanismos de control externo sobre la Comisión Electoral Nacional, así como establecer un sistema de pensiones específico para profesionales del sector científico y tecnológico.