La Oficina Presidencial manifestó su oposición a todo tipo de violencia en relación con el reciente ataque masivo lanzado por Israel contra Irán, así como al aumento de las hostilidades militares entre ambos países.
En un comunicado emitido durante el fin de semana, la Presidencia instó a las partes implicadas a actuar con sensatez y prudencia para evitar una mayor escalada en la región. Asimismo, indicó que el presidente Lee Jae Myung expresará su postura sobre el conflicto en la próxima cumbre del G7, donde se prevé que la situación en la región sea uno de los temas destacados en la agenda.
El Ministerio de Relaciones Exteriores ya había emitido previamente una declaración oficial en la que afirmaba que la creciente inseguridad en Oriente Próximo es motivo de "profunda preocupación" para la comunidad internacional. El Gobierno subrayó su deseo de que la tensión se reduzca lo antes posible.