El número de personas con empleo en Corea del Sur podría reducirse de forma absoluta a partir de 2032 si persiste la actual tendencia de descenso demográfico, según las previsiones del Banco de Corea.
La institución estima que, dentro de siete años, el mínimo de población ocupada necesario para mantener una tasa natural de paro en niveles habituales empezará a decrecer. Asimismo, la proporción de mayores de 15 años con capacidad potencial para participar activamente en la economía podría comenzar a disminuir desde 2033.
El informe señala que la integración económica de la ciudadanía repuntó significativamente tras el fin de la pandemia de COVID-19, impulsada por la flexibilización de la jornada laboral y la expansión de la demanda de personal en el sector servicios. No obstante, advierte de que esta recuperación no puede conservarse indefinidamente. Si la población continúa retrocediendo, también lo hará inevitablemente el número de trabajadores.
El banco central alerta de que una menor tasa de participación podría afectar negativamente tanto al PIB nominal como al PIB per cápita del país. Aunque reconoce que los cambios en la estructura demográfica son difíciles de prever con exactitud y aún más complejos de revertir en el corto plazo, subraya la importancia de actuar con antelación.
En este sentido, insta a las autoridades a diseñar políticas eficaces que fomenten el empleo sostenido entre los jubilados, así como la mayor incorporación de jóvenes y mujeres al mercado laboral.