El exasesor del Departamento de Defensa de Estados Unidos Dan Caldwell ha propuesto una fuerte reducción del contingente militar estadounidense en Corea del Sur. Su planteamiento consiste en recortar la cifra actual, de unos 28.500 soldados, en más del 60%, hasta aproximadamente 10.000.
Caldwell ocupó el cargo de asistente del secretario de Defensa, Pete Hegseth, entre febrero y abril de 2025. En su opinión, el Pentágono debería limitar el despliegue aéreo mediante el traslado de dos escuadrones de cazas a otras regiones y la repatriación de un tercio del personal técnico responsable del mantenimiento de aeronaves.
Según sostiene el exfuncionario, Washington no dispone en estos momentos de plena libertad para utilizar sus recursos militares y bases en la península en caso de que se desate un conflicto armado en otras zonas del Indo-Pacífico.
Estas declaraciones llaman la atención por alinearse con las demandas de la Administración del presidente de EEUU, Donald Trump, que desde hace meses presiona al Gobierno surcoreano para que incremente su presupuesto de defensa y asuma una mayor parte de los costes asociados a la presencia estadounidense en su territorio.