La Administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, barajó la posibilidad de exigir a Corea del Sur que incrementara su gasto en defensa hasta el 3,8% del PIB durante las últimas negociaciones comerciales, aunque finalmente la idea fue descartada y no se planteó como condición para la firma de un acuerdo arancelario, según el diario 'The Washington Post'.
Conforme a un documento interno de la Casa Blanca citado por el periódico el sábado 9 (hora local), el Ejecutivo de Trump tenía previsto utilizar los gravámenes para presionar a otros países a ceder en cuestiones de política exterior y seguridad.
Como ejemplo, el rotativo mencionó el primer borrador del pacto comercial con el Gobierno surcoreano, en el que quedaban patentes las intenciones de EEUU. El informe contemplaba exigir a Corea del Sur que elevara el gasto militar desde el 2,6% actual del PIB hasta el 3,8%. También incluía la solicitud de emitir una declaración política en apoyo de la llamada "flexibilidad estratégica" de las tropas estadounidenses desplegadas en la península, un concepto que permitiría movilizar con mayor rapidez a dichos efectivos para contrarrestar la influencia creciente de China.
Se desconoce si estas demandas llegaron a presentarse formalmente durante las conversaciones. Seúl ha señalado que el gasto en defensa no se abordó en el diálogo sobre aranceles y que, en efecto, el texto definitivo del acuerdo no hace referencia a este asunto.