El número de personas atendidas por dolencias relacionadas con las altas temperaturas ya supera el total registrado el año pasado.
Según la Agencia para el Control y la Prevención de Enfermedades, entre el 15 de mayo y el 21 de agosto se contabilizaron 3.815 pacientes en salas de urgencias por insolación o golpe de calor, de los cuales 23 fallecieron. Los datos proceden del sistema nacional de vigilancia hospitalaria de emergencias asociadas al calor, en funcionamiento desde 2011 y que recoge información de más de 500 centros médicos en todo el país.
Con este balance, 2025 se perfila como el segundo peor año de la serie histórica, solo por detrás de 2018, cuando se notificaron 4.526 casos en total. La cifra actual ya rebasa los 3.704 pacientes reportados entre mayo y septiembre de 2024.
La agencia advirtió además de que la incidencia de estas enfermedades aumenta de forma proporcional al calor extremo. Así, cuando la temperatura máxima diaria se sitúa entre 27,7ºC y 31ºC, cada grado adicional provoca una media de siete nuevos casos. En el rango de 31,1ºC a 33,2ºC, la cifra se eleva a 22, y cuando el termómetro supera los 33,3ºC, cada grado más se traduce en alrededor de 51 afectados adicionales.