El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó que su país no retirará las tropas desplegadas en Polonia, miembro de la OTAN, aunque dejó abierta la posibilidad de hacerlo en otras naciones.
En una cumbre celebrada el miércoles 3 (hora local) en la Casa Blanca con su homólogo polaco, Karol Nawrocki, Trump señaló que, si Varsovia lo solicita, Washington podría aumentar el número de efectivos en territorio polaco. Desde 2014, tras la anexión rusa de la península de Crimea, en Ucrania, unos 10.000 soldados estadounidenses permanecen estacionados en Polonia.
Las declaraciones del mandatario atrajeron la atención no solo por su compromiso de mantener la presencia militar en Polonia, sino también por la posibilidad de una redistribución de las tropas estadounidenses en el mundo, un asunto particularmente sensible para Corea del Sur. Durante la cumbre con el presidente Lee Jae Myung, el pasado 25 de agosto, Trump evitó pronunciarse de forma clara sobre una eventual reducción del contingente militar en suelo surcoreano, aunque sí manifestó de manera contundente su intención de que los terrenos donde se ubican las bases militares pasen a ser propiedad de EEUU.