El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, destacó el jueves 30 (hora local) los resultados de su reciente gira por Asia tras regresar a Washington y subrayó con orgullo que países como Corea del Sur y Japón se han comprometido a realizar inversiones sin precedentes en territorio estadounidense.
El representante comercial, Jamieson Greer, quien acompañó al mandatario durante el vuelo de vuelta, afirmó que el Gobierno surcoreano planea invertir 150.000 millones de dólares en la industria naval de EEUU.
Por su parte, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, declaró ese mismo día en una entrevista con la cadena Fox Business que el acuerdo alcanzado entre los líderes de ambas naciones "marcará un punto de inflexión" para revitalizar la industria naval estadounidense.
Bessent añadió que Trump ha dado luz verde a la construcción de submarinos de propulsión nuclear surcoreanos en el astillero Philly Shipyard, en Filadelfia, una decisión interpretada como una clara muestra del interés de la Casa Blanca por reforzar la cooperación naval con sus aliados.
Asimismo, el secretario mencionó que Seúl y Tokio podrían participar en el proyecto de gasoducto de gas natural licuado (GNL) que Washington desarrolla en el estado de Alaska, un gesto que algunos analistas aseguran refleja un intento de atraer nuevas inversiones hacia la economía estadounidense.
No obstante, Corea mantiene la postura de que cualquier implicación en dicho proyecto deberá evaluarse en función de su viabilidad comercial, por lo que se especula que el asunto podría convertirse en un nuevo punto de debate en las futuras negociaciones bilaterales.