El Tribunal del Distrito Central de Seúl dictó el viernes 31 una dura sentencia contra los implicados en el proyecto de urbanización de Daejang-dong, en torno al cual pesan sospechas de corrupción y negligencia tanto por parte de funcionarios públicos como de participantes del sector privado.
La corte condenó al empresario Kim Man Bae, accionista mayoritario de la compañía de gestión de activos que obtuvo una participación significativa en el proyecto, y al exfuncionario Yu Dong Kyu, exdirector de Planificación de la Corporación de Desarrollo del Ayuntamiento de Seongnam, la entidad pública encargada de las obras. Ambos recibieron penas de ocho años de prisión, además de cuantiosas multas: 42.801,6 millones de wones en el caso de Kim y 810 millones de wones en el de Yu, por delitos de negligencia en el cumplimiento de funciones.
Asimismo, el abogado y el contador de Kim fueron sentenciados a cuatro y cinco años de prisión, respectivamente, mientras que el representante legal de la Corporación de Desarrollo de Seongnam recibió una condena de seis años.
Según el fallo, una parte sustancial de las ganancias derivadas del proyecto, que debieron destinarse al sector público y a beneficio de los ciudadanos, fue desviada hacia contratistas y otros participantes privados. El tribunal calificó el caso como un ejemplo de corrupción y subrayó que el Ayuntamiento de Seongnam tampoco está exento de responsabilidad, al existir indicios de que intervino en decisiones clave del proyecto.
No obstante, la sentencia no hace referencia directa al presidente Lee Jae Myung, quien ejercía como alcalde de Seongnam cuando se promovió la urbanización de Daejang-dong y que también fue imputado por presunta negligencia. El proceso judicial en su contra se encuentra actualmente suspendido, ya que el mandatario está protegido por la inmunidad presidencial.