El primer ministro, Kim Min Seok, ha expresado su preocupación por el proyecto anunciado por el Ayuntamiento de Seúl para reurbanizar las zonas próximas al santuario Jongmyo, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1995, y señaló que la ejecución de obras de esta envergadura requiere "una profunda reflexión", así como un debate exhaustivo sobre su gestión e impacto.
El 30 de octubre, el Consistorio de la capital aprobó un plan de reurbanización que afecta al centro comercial Seun, situado frente al santuario, y a sus alrededores. El proyecto eleva la altura máxima permitida de los edificios en la avenida Jongno de 55 a 101 metros, y de 71,9 a 145 metros para las construcciones ubicadas a lo largo del riachuelo Cheonggyecheon. No obstante, el proyecto ha generado una intensa controversia, ya que diversos sectores consideran que podría perjudicar la preservación del patrimonio cultural, especialmente en lo relativo al paisaje histórico que rodea Jongmyo.
En respuesta a la polémica, Kim visitó el lunes 10 la zona afectada y declaró que, antes de emprender cualquier obra en los alrededores del santuario, es necesario analizar minuciosamente los pros y los contras. Subrayó que, debido al alto valor histórico y cultural de Jongmyo, no se trata de un proyecto que el Ayuntamiento de Seúl pueda impulsar por su cuenta y mucho menos de forma unilateral. Por ello, el primer ministro ordenó al Ministerio de Cultura y al Servicio de Patrimonio Cultural que elaboren los mecanismos institucionales necesarios para garantizar la adecuada preservación del santuario y mantengan una coordinación estrecha con las autoridades municipales.
Por su parte, el alcalde de Seúl, Oh Se Hoon, defendió el plan frente a las críticas y argumentó que es necesario replantear si la arquitectura actual del distrito de Jongno realmente contribuye a realzar el valor paisajístico de Jongmyo. A su juicio, los edificios deteriorados y las construcciones precarias que permanecen en la zona desde hace casi seis décadas afectan negativamente al entorno urbano y no pueden mantenerse en su estado actual.