El presidente Lee Jae Myung destacó que el avance más relevante de las dos cumbres celebradas este año con su homólogo estadounidense, Donald Trump, fue el acuerdo que permitirá a Corea del Sur disponer de submarinos de propulsión nuclear. Según afirmó, esta decisión refuerza la flexibilidad estratégica y la autonomía del país y supone un logro de gran utilidad para su seguridad.
En relación con el lugar de construcción, señaló que aunque Trump había propuesto llevarla a cabo en los astilleros de Filadelfia (Estados Unidos), el Gobierno surcoreano considera esa opción poco viable y ve preferible que la fabricación se realice en territorio nacional, tanto por motivos económicos como de seguridad.
Respecto a las preocupaciones de que el programa pueda debilitar el régimen internacional de no proliferación, subrayó que los submarinos de propulsión nuclear no incorporan armas atómicas ni dispositivos de detonación. Asimismo, reafirmó que la desnuclearización de la península es un principio acordado entre las dos Coreas y que Seúl comparte plenamente los objetivos del Tratado de No Proliferación, descartando cualquier posibilidad de desarrollar armamento nuclear propio.