El presidente de Corea del Sur, Moon Jae In, mantuvo una audiencia privada con el papa Francisco el jueves 18 en el Vaticano, donde transmitió al sumo pontífice la intención del líder norcoreano Kim Jong Un de invitarle a su país. 

El santo padre expresó su disposición a visitar Pyongyang, si bien por motivos protocolarios debería recibir una carta de invitación oficial del dirigente norteño. 

Durante el encuentro, el Papa alentó al mandatario de Seúl a seguir adelante sin temor en su tarea de consolidar una paz perpetua en la península coreana, al tiempo de mostrar su apoyo al Gobierno surcoreano en el proceso de desnuclearización. 

Tras su visita a la Santa Sede, Moon se dirigió a Bruselas, Bélgica, para participar en la cumbre de ASEM. En paralelo, mantendrá encuentros con varios líderes europeos, incluida la primera ministra de Gran Bretaña, Theresa May, y la canciller alemana, Angela Merkel.