Un grupo de coreanas reclutadas a la fuerza por una empresa nipona en tiempos de guerra han ganado el juicio en segunda instancia ante un tribunal coreano.  

La división 12ª de lo civil del Tribunal Superior de Seúl convalidó la sentencia en primera instancia que ordenaba pagar entre 80 y 100 millones de wones a cada una de las 27 coreanas, o familiares, que interpusieron una demanda por ser forzadas a trabajar para Nachi-Fujikoshi Corporation.  

Dicha empresa, fundada en 1928, reclutó forzosamente a unas mil adolescentes coreanas de entre 12 y 18 años durante la Guerra del Pacífico para su fábrica en Toyama, Japón. En 2003, entablaron una demanda ante un tribunal local de Toyama que falló a favor de la empresa al estimar que el Acuerdo de Reclamación firmado entre Corea y Japón en 1965 dirimía el derecho individual a reclamar indemnizaciones por los daños sufridos durante la época imperialista. Y en 2011, el Tribunal Supremo de Japón desestimó su recurso de apelación. 

No obstante, las víctimas llevaron la demanda ante un tribunal coreano, después de que el Tribunal Supremo de Seúl concluyera que dicho acuerdo no extinguía el derecho de particulares a solicitar indemnización, y que el fallo de un tribunal nipón carecía de validez en Corea. Así, un tribunal coreano sentenció en primera instancia que Nachi-Fujikoshi debía indemnizar a las demandantes por daños y perjuicios, fallo que recientemente fue convalidado en segunda instancia.