Otro taxista ha intentado inmolarse como protesta contra el lanzamiento de una aplicación comercial de servicios de viaje compartido.

Un hombre de 62 años de apellido Kim se dirigió el lunes 11 hacia la puerta principal de la Asamblea Nacional de Seúl tras prenderse fuego, pero fue detenido al chocar contra otro vehículo. 

Inmediatamente fue trasladado al hospital y recibió tratamiento por quemaduras de segundo grado, sin riesgo para su vida. 

Según informan, Kim, integarnte del sindicato de taxistas, frecuentó la sala mortuoria del compañero que murió tras inmolarse en diciembre, en rechazo a la aplicación de servicio de coche compartido ( Car-pool) que planeaba lanzar la empresa tecnológica Kakao.

Es la tercera vez que un taxista intenta inmolarse en contra del servicio del establecimiento de dicho servicio.