Pese a la clara negativa expresada por el Gobierno surcoreano, se especula que Japón insistirá en la mediación de terceros países sobre el problema de la explotación laboral durante el colonialismo y los dictámenes emitidos en Corea contra empresas niponas para compensar dicha explotación. Es más, las autoridades de Tokio adelantaron que esperarán hasta la medianoche del jueves 18 la respuesta de Seúl al respecto.
El viceministro portavoz del país vecino, Yasutoshi Nishimura, declaró el miércoles 17, que el Gobierno japonés seguirá exigiendo a Corea del Sur tomar las medidas correspondientes para rectificar la actual situación, que vulnera el derecho internacional, según los japoneses, y aceptar la mediación de terceros, estipulada en el acuerdo intergubernamental de 1965.
Un posible próximo paso de las autoridades de Tokio sería llevar el caso ante la Corte Internacional de Justicia, sin embargo la prensa local detalla que por ahora no hay nada concreto.
En concreto, el diario Sankei divulgó que si bien el Gobierno japonés valora recurrir a la Corte Internacional de Justicia, tampoco se apresurará. Agregó que, por ahora, el gabinete de Abe se concentrará en una campaña de opinión pública internacional a su favor, y estudiará medidas a adoptar en base a como discurra en Corea del Sur la venta de los activos incautados a empresas niponas por explotación laboral.