El Gobierno de Estados Unidos está considerando imponer altos aranceles a los automóviles importados.
Al respecto, el secretario de Comercio de ese país, Wilbur Ross, declaró el martes 3 que Washington podría obtener una respuesta satisfactoria en la negociación con las empresas automotrices, pero la subida de aranceles dependerá del resultado final.
No obstante, se trata de un comentario más bien teórico pues entre líneas refleja la postura de Washington de seguir presionando con elevar aranceles a aquellos países que exportan un gran volumen de coches al mercado estadounidense.
Estados Unidos anunció previamente que, en base a la Sección 232 de la Ley de Expansión comercial, valoraba aplicar aranceles del 25% a la importación de automóviles y repuestos de coches de Japón, la Unión Europea y Corea del Sur.